Reseñas en "#27"

Reseña desorganizada sobre Flasmagroom de Mauro Koliva.

“La imagen se ha revuelto en alusiones, a veces incluso en indeterminación de sus elementos”

Eduardo Rubinschik. Fragmento del texto para la muestra.

Como un organismo vivo los dibujos y objetos del artista Mauro Koliva nos van invadiendo, estimulando e infectando nuestra percepción: la propia referencia acerca de la plastilina y la birome jamás será ya la misma. Cargado de líneas, texturas y miles de formas que se entrelazan, generan un vértigo inexplicable. “La textura es lo que trasciende lo figurativo y lo abstracto, es como una descripción del material” dice Mauro. En su muestra Flasmagroon, Mauro somete a la línea y a la lapicera a sus más oscuras imágenes, donde la primera sensación producida es el asombro ante la cantidad de incalculables trazos que componen cada obra. Precisión quirúrgica en el empleo de la constitución de los puntos, vertiginosidad en el efecto del trazo que se produce al componer con ojo del espectador la imagen final, su totalidad fragmentada.

Hablo de Mauro Koliva desde la proximidad, pero para aquellos que aún no lo tienen entre sus artistas argentinos favoritos es indispensable saber que nació en Misiones y siempre con la idea fija de hacer arte, Koliva pasó por la Facultad de Arte  (hoy FAyD) donde aprendió algo muy importante: lo que quería ser y lo que no quería ser. Ya como Licenciado en Artes Plásticas a modo de “catapulta” la academia lo expulsó a nuevos horizontes; horizontes en lo que algo quedaba claro: Koliva es un valioso artista y un indiscutible generador “de cosas” , varias que deberían ser memorables para los estudiantes de artes y de las cuales considero indispensables nombrar que junto a Maxi Peralta, Hugo Braga y Héctor Borges promovieron el primer espacio de experimentación como alumnos/artistas dando nacimiento al Centro de Arte Contemporáneo en la Facultad de Artes, como también su compromiso siendo  alumno, en su modo de implicación en la lucha por la actualización de plan de estudios de la Licenciatura en Artes Plásticas.

Entre sus recientes reconocimientos nacionales, fue el artista seleccionado de Misiones para la muestra “Congreso de Tucumán: 200 años de Arte Argentino” que sigue recorriendo el país.

Los invito a conocer su admirable trabajo y a leer algunos artículos sobre este artista que seguramente promoverán nuevos tipos de objetividad en cuanto a la muestra Flasmagroon, siempre dejando en claro que sus obras vuelven a sorprender por la complejidad de una línea que construye atrapantes universos visuales”

 

Valeria Anzuate es artista visual, performer y gestora cultural. Licenciada en Artes de la FayD. Cursa la Especialización en Curaduría y Comunicación del Arte.

 

Link relacionado: http://www.galeriavasari.com.ar/es/muestras/detalle/86

Después de vivir un siglo…

Dirigida por el chileno Andrés Wood, también autor de las premiadas Historias de Fútbol, La fiebre del loco, y Machuca; basada en la biografía homónima de Ángel Parra, la película titulada Violeta se fue a los cielos (2011) cuenta la vida y obra de Violeta Parra, una de las artistas más emblemáticas de la historia latinoamericana del siglo XX. Además de tener éste como eje central de la película, el cineasta también aborda críticas en el aspecto socio cultural y económico de Chile, como también lo hace en otros de sus films.

A través de una focalización interna variable podemos entrar en el punto de vista de muchos de los personajes, pero sobre todo de Violeta (interpretado por Francisca Gavilán), y el espectador sabe tanto como ellos nos cuentan: a través de un montaje que no sigue una línea cronológica directa, podemos viajar tanto a su infancia como a su adultez, tanto al instante en el que recibe su primera guitarra como al momento en convertirse en ser la primera latinoamericana en exponer su trabajo plástico en el museo del Louvre, en París. Pero lo interesante de todo esto es que, a través de dichos recursos cinematográficos, podemos sumergirnos en el interior de cada personaje, todo lo que sintieron y pensaron en los momentos que atravesaron.

También muchos planos muestran su dicha y desgracia ante distintos acontecimientos de su vida, por lo que también debemos aplaudir a la actriz Francisca Gavilán por su trabajo, quien se tomó un año entero para estudiar el papel, no solo para personificar, con sus aciertos y contradicciones, el fuerte carácter del personaje sino también para igualar el color de voz de la cantante, ya que la película también genera una banda sonora propia, adaptando la música de Violeta a versiones propias, jugando entre la auricularización interna al escuchar lo que los personajes oyen y la auricularización 0 mezclándose ésta música con otras escenas en un montaje paralelo.

Si bien Wood ha declarado haber tenido un gran miedo al proyecto debido a la carga inmensa que conllevaba contar a tan colosal artista, la aclamación de la crítica, el éxito de taquilla, los premios conseguidos a nivel nacional e internacional y la película en sí reflejan el triunfo de este largometraje en todo sentido.

 

Wally Monzón es ilustrador y estudiante avanzado de la Tecnicatura en Medios Audiovisuales y Fotografía, FAyD.

Link: https://www.youtube.com/watch?v=na4T1Z9STO0

Carta a quien se fue…

Querida Leticia:

Aprovecho la silenciosa siesta misionera para escribirte, así puedo imaginar que te escucho sin tanto quilombo.

De seguro me recriminarías el hecho de que te escribiera, hasta quizá con algunos insultos, pero ambos sabemos que no puedo evitarlo. He decidido hacerte mi religión. Y no ha sido tarea fácil…

Y no me mires con esos ojos anti-esotéricos; que tengo en mis manos la evidencia de esta carta, mi oración, mi plegaria, mi búsqueda del milagro.

¿Todavía insistes en llamarme loco? Porque yo aún quiero llamarte loca, y que rabiosa me escupas la saliva acumulada en tu boca para, por lo menos, sentirte un poco.

Al parecer te cansaste de mí, de nosotros, de todos en sí. Pero ¡oye! No hay razón para no volver… Los años y la distancia se acrecientan y proporcionalmente te extrañamos todos… yo te extraño.

Sabes lo importante que es la libertad para mí, por eso no voy a buscarte ni te traigo de los pelos; volver será siempre tu decisión. Y en todo caso, de que la estés pasando mejor donde estés. Procura contestarme, así puedo constatar de que estás bien, en un lugar mejor.

O si en su defecto precisas ayuda, puedo batirme contra los dioses, contra los científicos, contra el universo o hasta contra vos misma. Para que dejes de mentirme, de mentirnos, de mentirte; con tus ojos cerrados, que causan nuestros ojos mojados, mis ojos rojos y húmedos. El vacío y nuevamente el silencio.

En fin, Diego acaba de levantarse y está escuchando 7 years de Lukas Graham, por si en tu cielo tienen YouTube y quieres saber cuáles son sus gustos. Es muy gracioso escucharlo cantar en inglés, bueno, intentándolo.

María y Néstor están preparándose para trabajar, mientras Nahuel y Fernando siguen durmiendo.

Creo que es hora de despedirme, aunque no quiera y seas vos quien me llena, seguiré buscando tu egregia personalidad, siempre tan correcta y perspicaz. Así es como te recuerdo; como te recordamos.

Recuérdanos.

 

Gabriel Kurtz es estudiante avanzado de la Tecnicatura en Medios Audiovisuales y Fotografía, FAyD.

 

Porque el sol también se levanta

Las traducciones siempre corren el riesgo de entorpecer el significado real de un título o texto.

En este caso, la novela publicada en 1926 de Ernest Hemingway The sun also rises se dio a conocer en castellano como Fiesta. Si bien, puede ser adecuado el nombre teniendo en cuenta los eventos narrados en la misma, de todos modos su título original refleja de mejor manera la filosofía de vida adoptada por el protagonista de esta historia de amor impedido por una incapacidad física. Recordemos que A moveable feast (obra póstuma de 1964) también ha sufrido cambios en su pasaje de idiomas y se conoce como París era una fiesta.  

Cuando uno comienza a leer la novela The sun also Rises puede tener la impresión de adentrarse pura y exclusivamente al mundo del boxeo. Pero una vez avanzada, la historia narrada va más allá de ese ambiente descrito y se introduce en la fiesta de San Fermín en Pamplona –excelentemente explicada y bien conocida por el autor- junto a una serie de encuentros y desencuentros entre su protagonista Jake Barnes (un periodista estadounidense que vive en París), sus amigos y Lady Brett Ashley (una ex enfermera que Barnes conoció luego de la Gran Guerra en la que fue herido).

 

La prosa de Hemingway es sencilla, pero sumamente rica cuando su narrador (y protagonista) relata, desde la pasividad e impotencia, la serie de acontecimientos que se van dando desde su partida de París hasta la experiencia en Pamplona. Las idas y venidas de Lady Ashley con sus enredos amorosos; la pasión y el cariño que se tienen ambos y su abnegación por las actitudes de la mujer que ama. Barnes, incapacitado sexualmente (misterio que nunca se revela), se relega a observar y narrar desde el silencio personal.

Todo enmarca un dolor escondido y profundo que envuelve –por momentos- escenas melodramáticas y existenciales. Una trama que repercute en lo que Gertrud Stein llamó “la generación perdida” del período de entreguerras. Una generación que, a pesar de sus grandes temores y fantasmas -frutos de hechos históricos aberrantes-, supo continuar creando obras memorables, sabiendo que cada día el sol también se levanta.  

Valeria Darnet es Lic. en Artes Plásticas, crítica, artista grabadora y docente UNaM.

Datos de la Obra
Título original: The sun also rises
Autor: Ernest Hemingway
Año: 2014 (1926)
Penguin Random House. Ed. Debolsillo
Páginas: 288

Link: https://www.casadellibro.com/libro-fiesta/9788497597937/915598