Reseñas en "#37"

¿Quién educa a quién?

En un video filmado desde un celular que fue publicado en las redes, una persona pregunta a dos niñitas Mbyã que conozco personalmente y de quienes reservo su identidad por ser menores, si les gustó la experiencia de participar en un mural donde la temática fue la naturaleza y los animales de la selva, coordinado por un artista ambientalista que recorre algunas comunidades y realiza talleres con los niños de pueblos originarios y de escuelas rurales con la finalidad de concientizar sobre el cuidado de nuestra naturaleza. Las niñas estaban contentas, muy felices de participar, las conozco y celebro que hayan tenido la oportunidad de dejar su huella identitaria en esos muros, pero la pregunta final que se le hizo: – ¿Van a cuidar más a la selva y a los animales?, me encendió un sin número de interrogantes.
Espero que esta interpelación haya sido un desliz inocente, una frase inoportuna pronunciada con tanta rapidez que no le haya dado tiempo para reflexionar sobre varias cosas:
* ¿Estuvo bien hacer ESA pregunta en ESE preciso lugar? (Escuela creada en Puerto Bosetti por la firma chilena Arauco -dueña de más de 255 mil hectáreas de suelo misionero que degradan con monocultivo/pino para fabricar pasta celulosa)
* ¿ Estuvo bien dirigida la pregunta a dos niñas Mbyã que pertenecen a una comunidad que ha recibido hostigamiento por la misma firma Arauco para que desalojen esa tierra junto a otros 30 niños, padres y ancianos, tierra que por otro lado les pertenece histórica, moral y constitucionalmente?
* ¿Será que seguimos percibiendo el mundo adultocéntrico como incuestionable, inapelable, ineducable (y me permito con vergüenza la creación de este término) en
ecología, conciencia ambiental, humana, etc.?
* ¿Será que creemos que la infancia sigue perteneciendo a un futuro que jamás llega y no al presente que le dejamos como legado, con cientos de imperfecciones, necesidades, injusticias, enfermedades, y miles de etc., más?
* ¿Sinceramente esperamos que los niños arreglen las cagadas que hacemos los adultos y de las que nunca nos hacemos cargo?
* ¿Qué contenidos educativos estamos transmitiendo?
* Un artista ambiental ¿puede trabajar a través del arte en un contexto territorial y cultural que le es ajeno? O debería preguntarse ¿de qué manera genero conciencia
ambiental en mi ciudad, capital de nuestro país desde donde se mira al resto de las
provincias como el interior (¿!) de personas incultas, y es acaso Bs As lo que nos cubre externamente, nos forma y educa?
* Los materiales utilizados para generar conciencia ambiental, ¿también son
ecológicos? ¿La pintura es sintética o aprovecho mi trabajo de campo con pueblos
originarios para aprender a usar los tintes naturales que utilizan ancestralmente las
comunidades? ¿El papel que usa en su taller, tiene un costo de cuántos árboles sacrificados? La mayoría plantados en nuestra provincia, quitando a nuestro suelo misionero su mayor riqueza, la biodiversidad de nuestra selva.
* ¿Damos participación a las comunidades sobre los contenidos educativos o realizamos consultas previas, generamos espacios de diálogos, modificamos nuestra mirada occidental sobre la educación y su influencia neocolonizadora?

Sigue la lista de preguntas, cuestionamientos y autocríticas, surgen incontables ocasiones vivenciadas directa o indirectamente, donde quienes se acercan a las comunidades lo hacen cometiendo el mismo error:
-Voy a enseñar.
Así me sucedió, hasta que fui consciente del infinito universo que estaba descubriendo, del cual sigo y seguiré aprendiendo todos los días.
Sigo recordando una frase leída frente a una escuela bilingüe de una comunidad Mbyã que expresaba:
-En memoria de nuestros sabios analfabetos del monte.

Carol Marin es tallerista en comunidades Mbyã, muralista, ilustradora, estudiante de la carrera de Licenciatura en Artes Plásticas de la FAyD, UNaM.

Ante todo, humana.

É necessário se espantar, se indignar e se contagiar,
só assim é possível mudar a realidade.
Nise da Silveira

 

Si bien hoy en día la Arteterapia es una disciplina institucionalizada en carreras de grado y posgrado, reconocida tanto en nuestro país como en muchas universidades alrededor del mundo, no siempre ha sido así. Para el contexto de Río de Janeiro de 1940, el arte en el campo de la medicina sólo categorizaba como “pasatiempo” de algunos pabellones de pacientes psiquiátricos.
Nise: O Coração da Loucura es un film brasilero de 2015 que, bajo la dirección de Roberto Berliner con muy buenas actuaciones de Gloria Pires como protagonista y de sus compañeros de elenco como enfermos mentales, narra la historia basada en hechos reales de la psiquiatra Nise da Silveira (1905-1999), una de las primeras mujeres médicas de Brasil, graduada en 1926 y pionera en su campo.
Luego de un confinamiento de 18 meses que comenzó en 1936 -a raíz de la Insurrección Comunista en Brasil de 1935-, quien introdujo la psicología de Carl Jung en el país debió enfrentarse a sus colegas varones, tanto en teorías y prácticas psiquiátricas, como ante el menosprecio constante por ser la única mujer profesional a la par de aquellos.
Una vez regresada a la actividad profesional en el Centro Psiquiátrico Nacional Pedro II, en Río de Janeiro, 1944, en desacuerdo total con los métodos de electrochoque y lobotomía para los pacientes del lugar, la doctora es transferida al pabellón de los desahuciados, donde crea el área de la Terapia Ocupacional. Convencida de que el arte es una de las mejores herramientas de canalización comunicativa para los internos, comienza un experimento sobre la emoción humana que la llevaría, a lo largo de toda su trayectoria, a obtener becas, premios y reconocimientos a nivel mundial.
La creación artística y el acervo logrado por sus pacientes -Adelina Gomes; Carlos Pertuis; Emygdio de Barros, Octávio Inácio, fueron algunos de los más destacados- ha repercutido en la sociedad carioca intelectual y cultural de mediados del siglo XX, dejando una marca imborrable en su historia: se hicieron muestras, se crearon museos relacionados, y hasta los mismísimos agentes de la Institución Arte brasilera avalan sus producciones hasta el día de hoy.
Sumamente cuidada la estética y colorimetría del film, la puesta en escena y la dirección fotográfica de la mano de Andre Horta, Nise… nos traslada a un universo que muchas veces tememos pero habita en cada uno de nosotros: la locura es tan humana como la cordura y, tal vez, el secreto del equilibrio entre ambas esté en las palabras de Nise: “Não se curem além da conta. Gente curada demais é gente chata. Todo mundo tem um pouco de loucura. Vou lhes fazer um pedido: Vivam a imaginação, pois ela é a nossa realidade mais profunda. Felizmente, eu nunca convivi com pessoas ajuizadas”.

Datos de la Obra
Título original: Nise: O Coração da Loucura
Año: 2015
Duración: 106 min.
País: Brasil
Dirección: Roberto Berliner
Guion: Roberto Berliner, Flavia Castro, Patrícia Andrade, Chris Alcazar, Mauricio Lissovski, Leonardo Rocha,
Maria Camargo
Música: Jaques Morelenbaum
Fotografía: Andre Horta
Reparto: Glória Pires, Simone Mazzer, Julio Adrião, Claudio Jaborandy, Fabrício Boliveira, Roney Villela, Flavio Bauraqui, Bernardo Marinho, Augusto Madeira, Felipe Rocha
Productora: TV Zero

 

Valeria Darnet es artista grabadora, crítica y docente-investigadora UNaM.
Link: https://www.youtube.com/watch?v=SaxliqTESKc

Jugo De Tigre y su cúmulo sonoro

Es difícil caracterizar la música de Jugo De Tigre (JDT) -dúo compuesto por el tecladista Leandro Yahni (Posadas, 1977) y el baterista Darío Vega (Quilmes, 1971)- sin acudir a similitudes ilusorias. O en todo caso, se puede precisar que JDT podría es un dúo pero no hay nadie que cante, no hay letra; tampoco es música de cámara. Es un dúo de música instrumental e improvisación, pero no hacen jazz, tocan rock. Son dos músicos, pero suenan como un power trío.
La música de Yahni-Vega no tiene similitudes demasiado evidentes, o a lo sumo se podría identificar un diseño sonoro inspirado en determinados géneros (el funk, el ambient, la música experimental) y la pertenencia a diversas tradiciones estéticas y musicales (el post punk, el rock sinfónico, el heavy metal orientado al hard rock), o que evocan lateralmente la música de documentales de televisión o bandas de sonido de películas clase B.
Cúmulo (2018), su primer disco, es precisamente una acumulación de ideas musicales en la que se superponen tradiciones, y esa superposición posibilita un nuevo modo de interpretar esas herencias en el contexto misionero.
Por otra parte, JDT es un dúo en su sentido más estricto: hay un equilibrio que evita que un sonido sea más protagonista que el otro. Si bien podríamos presumir que los teclados por su carácter armónico, su anclaje electrónico, su complejidad y su pluralidad sonora podrían quitar protagonismo a la batería instrumento acústico, de percusión, limitado, que requiere una amplificación que es externa a su naturaleza estaríamos de entrada en un error. Esa combinación equilibrada de un sonido que tiende hacia abstracción eléctrica (los sintetizadores) y de otro que hace de cable a tierra por su composición mineral y maderosa (la percusión) es la clave para apreciar la música del primer disco de Darío Vega y Leandro Yahni.
Por momentos uno puede olvidar que los JDT son de Posadas, Misiones (Argentina, incluso), porque no parece haber en ellos una tendencia que privilegie o enfatice lo local, lo regional o lo nacional. El discurso musical predominante excluye gestos demagógicos hacia una identidad musical estereotipada. Es posible que por su carácter de grupo instrumental algunos los catalogaron muy de prisa dentro del jazz experimental; sin embargo, esa etiqueta es engañosa en el caso de JDT y si alguien se parase frente a la banda con ese criterio posiblemente se decepcionaría.
De algún modo, el singular nombre de la banda es un adelanto de lo que la banda propone: sabemos lo que es “jugo”, sabemos lo que es “tigre” pero no sabremos lo que es un “jugo de tigre” hasta que lo hayamos probado.

 

Datos de la obra:
Banda: Jugo de Tigre
Integrantes: Darío Vega (batería y percusión)
Leandro Yahni (teclados y sintetizadores)
Título del disco: Cúmulo
Discográfica: Independiente con el apoyo del Instituto Nacional de la Música (INaMu)
Año: 2018

Datos técnicos:
Grabado entre agosto y septiembre de 2017 en Tierra Soñada Estudio. Músicos invitados:
Gonzalo Bobadilla y DJ Wincha. Grabado, mezclado y masterizado por Marcelo Kuczek.

Fotos del álbum: Natalia Zabrodiec.
Diseño, arte y fotografía de tapa: Santiago S. Suárez.
Facebook: https://www.facebook.com/pg/jugodetigre/ads/?ref=page_internal
YouTube: https://www.youtube.com/playlist?list=OLAK5uy_n36FO768_ptq0Jvjc20RAFnTAfoUWcQc4
Spotify: https://open.spotify.com/album/5T0g2Pbhxhiq47e3A3Bw3B

Sergio Quintana es Profesor y Licenciado en Letras, Magíster en Semiótica Discursiva. Se desempeña como docente e investigador en la UNaM.

Paridad: maquillaje de un régimen opresor.

En octubre de 2018 la legislatura de nuestra provincia votó por unanimidad la ley de Paridad de Género, con lo cual las listas electorales deberían estar compuestas por un 50 por ciento de mujeres. La aprobación fue presentada como “una conquista histórica” de las misioneras y de los festejos participó casi la totalidad de los partidos políticos.
Ahora bien, el oportunismo de estas fuerzas políticas hace pie en la consideración, más o menos extendida, de que la presencia de más mujeres en los espacios de decisión nos permitirá avanzar en la conquista de nuestros derechos. Sin embargo, la realidad se encargó en numerosísimas oportunidades de demostrar que la presencia de mujeres en los espacios políticos y de poder no significa, per sé, un avance en nuestras reivindicaciones. Cristina Kirchner fue presidenta durante ocho años, durante los cuales se encargó de bloquear el tratamiento del proyecto de interrupción voluntaria del embarazo, una de las demandas históricas del movimiento de mujeres. Además, fue durante su gobierno que se llevó a cabo la reaccionaria reforma del Código Civil que significó un retroceso en varios aspectos, particularmente al considerar en su artículo 19 que la vida humana comienza con la concepción. Fue ésta reforma la que utilizaron como mayor argumento legisladores, curas y pastores en su campaña contra el aborto legal.
Otro ejemplo lo encontramos en los votos de las diputadas nacionales en ocasión del tratamiento del proyecto IVE en el congreso: de las 100 diputadas 50 votaron a favor, 49 en contra y una se abstuvo, vaya paridad.
¿Por qué el ingreso de mujeres a cargos políticos no se traduce en avances en las condiciones de existencia de las trabajadoras? Porque el ingreso de las mismas no está condicionado al ingreso de nuestro programa de reivindicaciones. No existe programa político burgués que pueda resolver el problema de la mujer trabajadora, ni ocuparse de su empoderamiento porque choca con la pared de la precarización, el
ajuste y todas las miserias garantizadas por un estado al que ya nos ocupamos en señalar como el responsable de la perpetuación de nuestra situación de opresión y sometimiento. En los programas e incluso en su composición en partidos como la Renovación, PJ, UCR, PRO el pliego político histórico del movimiento de mujeres está ausente. Y si tuvieran alguna mención, sus acciones legislativas no podrían
aprobar los presupuestos donde se garantiza la miseria salarial para las estatales, los despidos y en el mejor de los casos la continuidad de la precariedad laboral como en los parques de La Salud y Conocimiento.
El movimiento de mujeres de nuestro país, con décadas de lucha, jamás incluyó entre sus demandas una ley en éstos términos. Cabe preguntarse si en todos éstos años no percibimos que teníamos a mano la llave para resolver nuestros problemas. No pareciera ser el caso y a sabiendas de que ésta ley generó ciertas expectativas en muchas compañeras, tenemos que remarcar: se plantea el rechazo de los cupos de toda clase, pues no sirvieron para avanzar en nuestros derechos, únicamente fueron utilizados como instrumento del estado para intervenir y regimentar la vida interna de los partidos. Antes con el cupo de 30 por ciento y ahora con el de 50, las trabajadoras tenemos los mismos problemas para participar en política: el peso de las tareas domésticas, la carga casi exclusiva del cuidado de niños y ancianos, la precariedad laboral, la maternidad forzada, la violencia en todas sus formas.
Mientras no se cambien éstas condiciones materiales los cupos son, en los partidos del régimen, para las pocas que tienen sus necesidades cubiertas. La emancipación de la mujer es incompatible con un régimen basado en la explotación de las mayorías populares por parte de una minoría patronal. A partir de ésta comprensión queda planteada la pelea fundamental: la lucha contra este sistema al que la violencia y sojuzgamiento de las mujeres le es funcional. Y la lucha es por un gobierno de las y los trabajadores.

Olga Aguirre es militante socialista.

Link https://prensaobrera.com/politicas/63652-misiones-la-justicia-electoral-convalida-el-cupo-contra-la-participacion-de-las-mujeres